El piloto de Ferrari Kimi Raikkonen no quiso correr riesgos estúpidos ayer en Malasia ya que sabia que su motor estaba en mal estado y corrió con menos caballos y menos revoluciones. Los mecánicos le restaron revoluciones y caballos al motor para ganar fiabilidad. Le hicieron perder al motor 75 CV y se rebajaron las revoluciones a 17.500 mientras los demás vehículos tienen 19.000. A parte de tocarle al motor también se descargo la aerodinámica del monoplaza para ganar velocidad punta pero ésto le resto agarre en el tren delantero en las frenadas y las curvas. Aun así fue capaz de pegarse a Hamilton en las últimas vueltas y quedar con un bonito 3º Puesto. Bravo por Kimi. Próxima estación Bahrein. Seguiré informando. Desde Santiago de Compostela.
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